La capacitación organizacional comenzó con: La General Electric en 1956; después vinieron otro referentes importantes Hamburguer University de McDonalds; el Boston Consulting Group (BCG); y mucho otro que hicieron que las universidades corporativas en las empresas se duplicarán entre 1997 a 2000 la cantidad de 2000 a 4000 universidades empresariales. El número de universidades corporativas y organizacionales ha venido aumentando exponencialmente y si a esto le sumamos la revolución en la educación que se está implementando en la virtualidad (LMS, Learning Management System), las cifras son arrolladoras.
Según estudio realizado por Brandon Hall Group Learning (2016 Technology Study), el 48% de las empresas están buscando una nueva o diferente tecnología de capacitación organizacional, el 47% están revisando qué hacer con las deficiencias de sus capacitaciones y el resto de los encuestados piensan que lo están haciendo bien.
Las cifras de la educación virtual muestra estadísticas vagas, porque la definición de qué es capacitación organizacional es difícil de medir. Implementar un software que intercambie preguntas y respuestas o programar una clase presencial mediante una “plataforma virtual”; difícilmente puede llamarse universidad corporativa online, como es el caso de Moodle y Blackboard. El modelo de capacitación organizacional está cambiando; a las empresas no les interesa depender de terceros para capacitar a sus empleados. Están creando sus propias universidades virtuales.
Además, la ventaja principal de tener una universidad corporativa virtual, es que todos los cursos que se crean van adaptados y alineados a las estrategias de la compañía. Y es que cada empresa tiene desafíos específicos y personales: Tener formación y desarrollo de conocimiento especializado; solo para el uso interno de la empresa, hace que sea más fácil centrarse en sus distintas necesidades; ya que el conocimiento de una empresa tercera puede ser muy estandarizado y general.
Conclusión de capacitación organizacional:
Zalvadora [LMS] está haciendo un proceso de acompañamiento virtual personalizado en la implementación de la plataforma; modulando y adaptando a los diferentes desafíos específicos que tiene cada empresa. Alineando estrategias para la formación y el desarrollo de conocimiento especializado, solo para el uso interno de la empresa. El reto principal de este acompañamiento es probar que la capacitación presencial y una mala implementación de educación virtual, definitivamente no genera las interacciones correctas para incentivar el crecimiento empresarial; ya sea que estés comenzando con tu empresa o seas una multinacional.