¿Cuál es la primera palabra que se le viene a la cabeza cuando se piensa en la innovación? Ideas … creatividad … estrategia? Cuando se piensa en la innovación tiene que comenzar con … GENTE!
La colaboración en sí se ha innovado las empresas van más allá de los «equipos creativos» tradicionales a proveedores externos, socios, proveedores, clientes (esto de acuerdo a una encuesta mundial de CEOs por IBM). Esto no es necesariamente un rechazo del proceso creativo, donde los que tienen una habilidad particular en la ideación y conceptualización se pierden, sino más bien la necesidad de tomar la entrada y las ideas de muchos para llegar a un todo mayor.
Sin embargo, tenga en cuenta
Consejo # 1 en la búsqueda de la innovación colaborativa:
Mentes Diversos: Involucrar a la gente es lo ideal, pero tenga cuidado de la mentalidad de pensamiento de grupo (ver Patton, George S. – «Si todo el mundo está pensando igual, entonces alguien no está pensando.»). Esta tendencia, sin embargo es perjudicial, es muy común y puede venir con el territorio de que sus «tipos» son creativos.
Estos perfiles tienden a obtener energía a partir de nuevas ideas y disfrutar del proceso creativo, pero ¿qué sucede cuando todo el equipo de la innovación se compone de estos tipos de pensadores? Incluso las ideas muy creativas empiezan a buscar lo mismo … y es difícil de conseguir en realidad un plan para hacer que sucedan.
Consejo # 2: Piense fuera del equipo normal
Crear Libertad de Ideas: Sin burocracia, los grupos pueden llegar a las mejores soluciones, de acuerdo con el MIT Sloan Management Review. Los gerentes lo utilizan para dirigir los esfuerzos de innovación de la compañía ya que deben dar a sus trabajadores la libertad de aportar ideas por su cuenta y llevar a cabo sin mucha burocracia. Proporcionar una visión amplia (y tal vez algunos parámetros de presupuesto y de tiempo), pero no microgestión o se ahogara en el proceso de innovación.